Del Canil SAUJUMA-BUDI al Estudio de Proyectos

Hace, aproximadamente, 10 años atrás el amor y el gusto por los perros me llevó junto a mi hermano a pensar e imaginar la posibilidad de tener un criadero propio. En ese sentido, en marco de un festejo navideño, se nos presentó una pregunta que, con el correr del tiempo, resultaría en el origen de nuestro proyecto Canil SAUJUMA-BUDI: “¿podríamos vivir de algo que nos gusta tanto?”. A partir de ésta premisa, surgieron nuevos interrogantes que en la práctica los fuimos respondiendo -sin saberlo hasta ahora- con estudios y evaluaciones sobre el proyecto mismo.

Inicialmente, lo primero que pensamos fue si la raza escogida tendría recepción por parte del nicho de mercado que representan los amantes de los “Fila Brasileros”. Ésta duda la pudimos despejar cuando contactamos a uno de los criadores de fila más reconocidos del rubro, Claudio Lupo, de Canil Casta Noble.

Éste nos contó su experiencia y nos demostró que la compra de ésta raza venía creciendo año tras año. La calidad de nuestro producto no sería un problema, lo podríamos garantizar, puesto que nuestro primer casal (pareja de hembra y macho) se lo habíamos comprado a él tiempo atrás.

Sorteando la primer barrera “comercial”, el siguiente paso fue evaluar si sería valorado o no nuestro producto en el mercado, comenzamos a relevar información que nos permita cuantificar los posibles costos, la necesidades estructurales que nos demandaría el criadero y comparamos éstas necesidades económicas con nuestras disposiciones. Así mismo, como nuestra intención fue siempre armar algo que cumpla con todas las disposiciones legales correspondientes, realizamos un análisis de aquellas restricciones que potencialmente podrían impedir y/o restringir la realización de nuestro proyecto.

Realizada la evaluación de costos, garantizada la locación del criadero en un espacio acorde, y habiendo hecho las averiguaciones ante la Federación Cinológica Argentina (FCA), definimos la viabilidad del proyecto.

Al ser una organización pequeña, muy peña, no nos demandaría contratar personal, ya que entre los dos, mi hermano y yo, podríamos afrontar todas las labores que demanda un criadero. Eventualmente sabíamos que necesitaríamos de un especialista como el veterinario, pero sería algo que obligatoriamente tendríamos que tercerizar. En tal sentido, para la puesta en marcha del criadero, inicialmente contamos con todo lo necesario: la locación del criadero, la primera pareja de fila, compramos una hembra nueva, la habilitación por parte de la FCA, y los recursos económicos para afrontar los gastos iniciales hasta vender las primeras camadas.

De todo lo expuesto, surge “Del Canil SAUJUMA-BUDI al Estudio de Proyectos”, puesto que hace 10 años realizamos, sin saberlo, algo tan importante y relevante como es el proceso de los “Estudios del Proyecto” para lo que fue Canil SAUJUMA-BUDI (Santiago Augusto-Juan Manuel Burgos Diaz). Así, como a continuación se detalla, hicimos sin saberlo un pasaje de lo práctico a lo teórico.

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Fuentes:

• Diseño, Evaluación y Gestión de Proyectos - Resumen Unidad 01

• Diseño, Evaluación y Gestión de Proyectos - Resumen Unidad 05

• Diseño, Evaluación y Gestión de Proyectos - Resumen Unidad 06