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Rentabilidad Social... ¿a que nos referimos?

Actualizado: 16 oct 2018

La profundidad de los Estudios que se vayan a realizar cuando abordamos Proyectos de Inversión es muy importante ya que de ellos dependerá que se aconseje la implementación o no del mismo.


En este sentido es importante mencionar que cualquier conclusión a la que se llegue inclusive si es negativa, previa a la realización del proyecto en principio podría determinar que no se lleve a cabo el mismo. Pero esto sería 100% así si no se tuviera en cuenta la Evaluación Social del Proyecto. Es decir, puede pasar que por otro tipo de cuestiones, ya sean estratégicas, humanitarias o de otra índole sea recomendable realizar el proyecto aunque este no sea viable económicamente hablando. El caso más común es el de los Proyectos que tienen un impacto social directo, donde están vinculados los intereses de la Comunidad.


La Evaluación Social de Proyectos es un sistema de aprobación del uso de recursos públicos, a todo nivel de gobierno, que impide o dificulta que se asignen fondos a proyectos que no tienen rentabilidad social o a programas de gasto que pudieran realizarse más eficientemente de una forma alternativa. Pero, ¿a que llamamos rentabilidad social? La rentabilidad social es el valor que los proyectos aportan a la sociedad como beneficios a adquirir una vez que se ejecuten y se pongan en marcha. Esta rentabilidad puede ser positiva, como ya se mencionó independientemente de la rentabilidad económica del proyecto. Debemos responder la pregunta ¿el país estará mejor o peor si el proyecto se lleva a cabo? En este sentido entonces tenemos que determinar los beneficiarios del proyecto, las características socio-económicas de la localidad donde se desarrollará y determinar los beneficios que obtendrá dicha comunidad y cómo participará ésta durante su ejecución. Adicionalmente también hay que determinar los empleos e impactos que se generarán con el proyecto.

Para la realización de la Evaluación Social debemos señalar, identificar y dar a conocer las necesidades de la zona, municipio, estado o región donde se va a desarrollar el proyecto y del área o sector donde está enmarcado, con la finalidad de obtener un panorama general de las condiciones de la zona. Se debe explicar también de dónde se obtuvieron los datos que caracterizan a la comunidad objeto del proyecto.

Debemos señalar como es que el proyecto cubrirá la necesidad previamente detectada y cómo la comunidad se beneficiará con los bienes y/o servicios proporcionados. Si se generaran empleos gracias al proyecto, hay que detallar si los mismos son durante el proyecto o al finalizar el mismo. También si son directos, indirectos, temporales o fijos.


Finalmente el impacto generado por el proyecto se puede describir en términos cuantitativos y/o cualitativos de las modificaciones en la situación problema descripto que se espera alcanzar tomando en cuenta la población beneficiaria y su contexto.

Las descripciones cualitativas son la más utilizadas en estos casos tomando parámetros que expresan calidad, clase, tipo, diferenciación.


Los Objetivos más específicos del Estudio Social de los Proyectos incluyen los siguientes:

  • Prevenir que el proyecto resulte en la degradación de la calidad de vida existente de los residentes en las áreas donde el proyecto o acción que es objeto de evaluación tendrá incidencia.

  • Prevenir conflictos sociales entre los promotores, interesados e involucrados, y el gobierno, aumentando las posibilidades de aceptación del proyecto entre el público y las autoridades.

  • Identificar áreas donde la gestión del proyecto puede ser llevada a cabo de forma más eficiente y con menores costos para el promotor y para la sociedad.

  • Asegurar que los beneficios totales del proyecto, de cara a la sociedad, excedan los costos totales.

  • Prevenir que el proyecto genere costos indirectos que después tendrían que asumir las comunidades locales o el gobierno.

  • Identificar y proteger poblaciones particularmente vulnerables a los riesgos generados por el proyecto.

  • Asegurar que el proyecto no altere los procesos de cohesión e identidad social.

Por último, cuando el proyecto que estamos analizando tiene como finalidad la elaboración de un bien, se pueden analizar cuestiones concretas y cuantificables que tienen que ver con la relación de complementariedad o sustitución de los bienes relacionados con el que se está evaluando producir. Estos efectos son los denominados directos.

Como contrapartida también existen las denominadas externalidades, estas se dan cuando las empresas o los individuos imponen costos o beneficios a otros fuera del mercado. Una característica importante es que los terceros reciben estos costos o beneficios involuntariamente. Es fundamental entonces intentar valuar el daño causado y valorar también el costo de dicho daño; un ejemplo típico de una externalidad negativa sería en el caso de la producción de energía nuclear que trae beneficios para el generador de la electricidad pero trae impactos negativos sobre el medio ambiente con la creación de desechos radioactivos que son perniciosos para la sociedad.

Por todo lo expuesto resulta importante realizar un correcto análisis del rendimiento social que tendrá el proyecto que estamos analizando.

1 Comment


Proyectos UNTREF
Proyectos UNTREF
Oct 17, 2018

Excelente Laura!!!

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