“El Riesgo define una situación donde la información es de naturaleza aleatoria, en la cual se asocia una Estrategia con un conjunto de resultados posibles a los que se le asigna una probabilidad. La Incertidumbre caracteriza a una situación donde los posibles resultados de una Estrategia no son conocidos y, en consecuencia, sus probabilidades de ocurrencia no son cuantificables”.
Los conceptos anteriormente citados tienen la finalidad de ser aplicados a cuestiones prácticas de la realidad ya que, al finalizar este año tan particular para todos, me es inevitable llevar a cabo un análisis y un balance general acerca de todo lo transcurrido hasta este momento dado que fue un año en el que realmente afrontamos distintos desafíos y sobretodo, tuvimos que aprender a analizar y gestionar riesgos en distintos planos de nuestras vidas.
La presente pandemia nos afectó en distintos ámbitos al punto de llegar a condicionar nuestros proyectos a nivel personal, profesional, laboral, incluso a nivel social. Una Crisis Económica Mundial junto a transformaciones sociales, políticas y cambios en nuestros hábitos y formas de relacionarnos fueron algunas de las consecuencias de la aparición del COVID-19.
El artículo que leerán a continuación aborda - a modo ejemplificación - la forma en como en los distintos planos de nuestras vidas pudimos responder adecuadamente, acorde a nuestros análisis cualitativos y/o cuantitativos previos, a los riesgos que se nos presentaron a nivel macro-micro y que impactaron negativa o positivamente en la ejecución de nuestros proyectos. Por todo lo anteriormente dicho, haré un breve repaso por lo que definimos como “dar respuesta a los riesgos” y que tipos de respuestas a los mismos existen.
Definimos como Respuesta a los Riesgos al proceso mediante el cual uno desarrolla distintos planes de acción con la finalidad de incrementar oportunidades y reducir amenazas por lo cual esto implica que uno desarrolle distintas Estrategias para el abordaje de los Riesgos y genere Planes de Contingencia. ¿Qué tipo de respuesta podemos dar a los riesgos? Podemos optar, según nuestro criterio subjetivo y otros métodos para tratar el riesgo si es que aplican , por alguna de estas cuatro opciones: evitar, transferir, mitigar o aceptar. Si evitamos el riesgo esto implica que lo eliminemos por completo lo cual puede derivar en que cambiemos nuestros objetivos propuestos o los de nuestros proyectos e incluso puede significar que los cancelemos o eliminemos. En contraposición a la anterior respuesta, podemos decidir aceptar al riesgo, lo cual implica no hacer nada y elegir entre dos caminos de acción: pasiva (atendemos el riesgo en el momento que surja) o activa (generamos reservas de contingencia). Por otro lado, si decidimos transferir el riesgo esto implica que traslademos a un tercero el impacto del mismo mientras que, si lo mitigamos hacemos lo posible por disminuir la probabilidad de su ocurrencia o de su impacto.
Ahora bien, ¿Qué respuestas dimos frente a los riesgos a los que nos hizo enfrentar esta pandemia? En general, me animo a decir que nuestras respuestas se basaron, por sobretodo, en evitar y mitigar los riesgos y sus consecuencias más que otras dos estrategias de acción. A continuación, empezaré a ejemplificar desde una mirada macro hacia una micro (donde cuento mi anécdota personal) las distintas respuestas que se observaron en el contexto actual.
En primer lugar, me gustaría abordar el tema de la salud a nivel mundial ya que la existencia del virus fue el principal riesgo a afrontar por los gobiernos de los distintos países. En este caso, debo destacar que no existió una receta mágica que se presentara como la respuesta más efectiva a implementar contra el virus ya que tengamos en consideración que la incertidumbre fue un factor que estaba fuera del alcance del control político en los respectivos países por lo que, cada uno respondió - dilema entre la salud o la economía - al riesgo de distintas maneras según sus proyectos nacionales. Algunos países implementaron cuarentenas muy estrictas con la finalidad de mitigar el riesgo al contagio en cambio, otros pocos países adoptaron medidas un tanto controversiales aceptando la pandemia como un hecho inevitable con la intención de que su impacto sea nulo sobre su economía. En este primer apartado no ejemplifico a modo de no crear controversia ya que entiendo que cada país toma e implementa las medidas que considera convenientes a su población y cada decisión gubernamental está sustentada en la realidad de cada país.
En segundo lugar, la economía mundial fue la principal afectada por la pandemia ya que desde las empresas grandes hasta las más chicas, y ni mencionar los comercios, tuvieron que adoptar una serie de medidas de higiene y seguridad para afrontar la problemática actual. Por un lado, la gran mayoría de las empresas y comercios (a no ser que desaparecieran) elaboraron sus respectivos protocolos de salubridad con el fin de mitigar el riesgo de someter a un peligro de contagio a su personal de trabajo incluso algunas contrataron licenciados en seguridad e higiene con esta misma finalidad. En adición a lo anterior, debo enfatizar que todas las empresas y comercios se vieron presionadas a replantear la forma de llevar a cabo sus operaciones incluso de reformular sus proyectos, cambiar sus objetivos incluso eliminarlos (llámese a este último evitar riesgos) lo cual fue un proceso difícil pero a su vez creó nuevas oportunidades. En este caso además, lamentablemente muchas fueron las empresas y comercios que quedaron en el camino de la adaptación hacia una nueva realidad y junto a ellas fueron muchos los trabajadores y emprendedores los que se vieron afectados.
En tercer lugar, otro tema a abordar es cómo este año a nivel de mi experiencia personal aprendí a gestionar los riesgos que previamente identifique y analice que se presentaban en mi proyecto personal: recibirme. Por un lado, esta pandemia impulsó que adopte, al igual que Uds., un conjunto de acciones de prevención para mitigar el riesgo del contagio del virus que abarcaron desde medidas de higiene personal, mayor limpieza de los inmuebles y objetos, hasta cumplir con todas las medidas de distanciamiento social fijadas por el gobierno actual con la finalidad de evitar la propagación de casos.
Por otro lado, otro desafío que se presentó en el presente año fue en el ámbito académico ya que, en conjunto con mis compañeros de clases, docentes y universidad tuvimos que optar por llevar a cabo nuestras clases a través de la modalidad virtual con los esfuerzos que esto requiere: mayor organización, comunicación, coordinación, conectividad y por sobretodo trabajo en equipo entre todos los que formamos parte de esta comunidad educativa.
La pandemia me presentó el desafío de evitar que ocurra la peor de las consecuencias posibles: que es el no poder concluir mi etapa final universitaria, una etapa que resulta significativa para cualquier estudiante universitario que obtiene su primer título y, por otro lado, mitigar a través del estudio y esfuerzo conjunto con mis compañeros de clase, la probabilidad de que esto ocurra.
Para concluir mi ultimo posteo, debo decir que este año fue un desafío para todos ya que implicó que realicemos un esfuerzo individual y a su vez colectivo - sea con nuestras familias, compañeros de trabajo y/o de clases o la sociedad en general - para poder sobrellevar un momento de tanta incertidumbre el cual nos empujó a realizar cambios, no solo en la forma en como trabajamos o estudiamos, sino también en cómo nos relacionamos. Pienso que la clave fue llevar a cabo esfuerzos conjuntos para aceptar el cambio y poder sobrevivir a un año tan particular y difícil para muchos. Sin embargo, a pesar de los contratiempos y las consecuencias que generó esta pandemia puedo rescatar un gran aprendizaje que hemos adquirido a partir de que nos empujaron a salir de nuestra zona de confort y el cual podemos capitalizar y transmitir en un futuro no tan lejano.
Este saber y reflexión adquirida consiste en que en los momentos más difíciles podemos salir adelante porque aprendimos mucho de una etapa más complicada que las anteriores, aprendimos a vencer obstáculos de distintas magnitudes y connotaciones para poder concretar nuestros proyectos o al menos reformularlos en un momento que no parecía el propicio pero que finalmente, pienso, fue el adecuado. Lo que este año se llevó es irrecuperable pero lo que se aprendió, es incalculable.
Acá finaliza mi último artículo, gracias por leerme.
Andrea.
Fuentes:
Autoría propia sobre el presente posteo.
Unidad 7 : “Diseño, Evaluación y Gestión de Proyectos - Análisis de Riesgo y Sensibilidad”.
Unidad 8: “ Diseño, Evaluación y Gestión de Proyectos - Planificación Monitoreo y Control”.
Gracias profes!
Andrea, excelente tu artículo, muy buen análisis de la situación actual y muy buena reflexión, te felicito!!!