Cuando hablamos de la Rentabilidad de un Proyecto se tiende a pensar siempre en el beneficio económico que se va a obtener. Sin embargo, la rentabilidad de un proyecto puede medirse desde distintos enfoques más allá del económico, por ejemplo en cuanto a la adquisición del conocimiento o la rentabilidad social.
En el presente articulo, por un lado, se enfocará en describir los puntos esenciales para llevar a cabo una eficiente gestión de la rentabilidad económica, y por otro lado, se aludirá al concepto de rentabilidad social, ya que en la actualidad está siendo relevante a la hora de gestionar proyectos.
Puntos a tener en cuenta para la gestión de la rentabilidad económica:
Planificación y Presupuesto Realista: Es importante que se calcule y estime todos los costos en los que se va a incurrir en el proyecto. Para la gestión de la rentabilidad económica de un proyecto se debe tener en cuenta conceptos como valor actual neto y tasa interna de retorno. Por un lado, el valor actual neto surge de sumar los flujos de fondos que tienen lugar durante el horizonte de la inversión incluyendo el desembolso inicial actualizados según una tasa de interés determinada. Por el otro, la tasa interna de retorno es la tasa de interés que para un proyecto de inversión determinado hace que su VAN sea nulo. La regla de decisión es aceptar como rentables los proyectos con TIR > i siendo i la tasa de interés previamente definida.
Análisis de la Evolución del Proyecto: Cuando las tareas están bien planificadas, se registran los objetivos conseguidos y se valoran los costos reales y de esta forma, es posible estimar el grado de satisfacción y prever las soluciones para los posibles errores o conflictos, y, ademas, se puede realizar un análisis de riesgo más óptimo.
Seguimiento Continuo del Proyecto: Se debe procurar y anticipar los fallos en la ejecución para no tener que perder tiempo en la repetición de fases o tareas. A mayor número de errores y la consecuente repetición, más se elevará el costo del proyecto final. El seguimiento del proyecto no debe centrarse únicamente en los aspectos financieros. Debes tener en cuenta el nivel de satisfacción del cliente, la calidad que se va a ofrecer, la influencia del proyecto en el mercado, en la competencia y las necesidades de los posibles futuros clientes.
Evaluación de los Resultados: Es necesario recoger todos los datos que permiten disponer de una información privilegiada para dar solución a las desviaciones que se hayan detectado.
Rentabilidad más allá de lo Económico
Fuera de la rentabilidad económica, existen otros tipos de rentabilidad como la social.
En un contexto de auge de las nuevas tecnologías surgen en el mundo financiero nuevos actores y nuevas formas de hacer las cosas. Estos nuevos actores son los inversores socialmente responsables, que buscan obtener una rentabilidad social de sus inversiones. También emergen iniciativas con impacto social y/o medioambiental que pueden ofrecer esa rentabilidad social a los inversores socialmente responsables y además, al conjunto de la sociedad.
Las medidas de rentabilidad económica ya son conocidas y están bastante estandarizadas. Sin embargo, a las medidas de rentabilidad social les queda un largo camino por recorrer.
La rentabilidad social es el valor que los proyectos aportan a la sociedad como beneficios a adquirir una vez se ejecuten y se pongan en marcha. Esta rentabilidad puede ser positiva independientemente de si la rentabilidad económica del proyecto lo es o no.
Las organizaciones privadas deben tener en cuenta este tipo de beneficios y saber gestionarlos para obtener ventajas como el reconocimiento de su labor y el posicionamiento como empresas con valores éticos más allá de lo puramente económico. La rentabilidad social de un proyecto, aparte de producir una ganancia económica, aporta beneficios en la sociedad como la generación de empleo, contribución con sus impuestos a la financiación de los servicios públicos, respeto por el medio ambiente, etc., lo que repercutirá de manera directa en la rentabilidad intangible del proyecto que se emprenda y su posterior repercusión en la imagen general de la empresa.
Fuentes:
Naty, excelente el articulo!!!